el alumbrado público es un automatismo muy sencillo y depende de un reloj semanal, diario y horario o mejor todavía astronómico, para que alternamente se queden encendidas una semana la mitad y otra semana la otra mitad, a partir de la hora fijada de apagado nocturno, también depende de una fotocélula que es la que lo arrancara y parara con la luz de día.
es decir la fase de maniobra pasa por la fotocélula y a los contactos del conmutador horario; a través de este se actúan los contactores según la programación que quieras darle al alumbrado.